💰15% OFF EN TRANSFERENCIA I 💳HASTA 18 CUOTAS |📦 ENVÍO GRATIS compra superiores a $80.000

Que es BDSM y como se practica

¿Alguna vez has utilizado esposas, vendas o antifaces en tus encuentros sexuales? ¿Has interpretado juegos de rol basados en la jerarquía de poder como profesor/alumno o jefe/empleado? Entonces, ya te has introducido en el mundo del BDSM.


BDSM son las siglas de bondage/disciplina dominación/sumisión y sadismo/masoquismo. Definido de manera simple, es un conjunto de prácticas sexuales que se basan en una dinámica de dominación y sumisión. Así, cada uno de los miembros de la pareja adopta uno de estos roles, aunque es posible intercambiarlos.

El aspecto fundamental reside en que se trata de un encuentro totalmente consensuado y seguro. Ambas partes han de acordar los límites y, de este modo, el bienestar de los involucrados se garantiza en todo momento.

El término BDSM se acuñó en 1969 a raíz del trabajo del antropólogo Paul Gebhard; sin embargo, estas prácticas ya estaban presentes en civilizaciones muy antiguas y en culturas muy diversas, por lo que no se trata de algo nuevo.


Bondage

Por lo general, el término bondage se utiliza para referirse a las ataduras con cuerdas, sogas u otros elementos, muy presentes en el BDSM. Sin embargo, en el pasado, este solía hacer referencia a los vínculos de subordinación que se establecían entre amos y esclavos, entre señores feudales y vasallos.

En este sentido, además de nombrar la inmovilización con fines eróticos, también implica una relación en la que el poder es asimétrico.


Disciplina

La disciplina incluye las normas, los hábitos y los protocolos de comportamiento que han de seguir las personas en la posición subordinada. Por tanto, se refiere a un adiestramiento con reglas y castigos a través del cual el individuo dominante ejerce el poder sobre su contraparte.


Dominación

Hace referencia al rol que toma uno de los miembros de la pareja para ejercer el control sobre el otro. Así, esta persona es quien ordena y dispone a voluntad, mostrando dominio sobre el compañero sumiso.


Sumisión

Es el rol complementario a la dominación. En este caso, el individuo adopta una postura de subyugación que le coloca bajo la voluntad del dominante. La persona sumisa obedece y permite las acciones del compañero, siempre de una forma voluntaria y consensuada.


Sadismo

Hace referencia a las prácticas eróticas en las que una persona obtiene placer infligiendo dolor o humillación a la otra. De nuevo, cualquier práctica que entre dentro de esta categoría ha de ser segura y consensuada, ya que nada tiene que ver este término con el sadismo criminal.


Masoquismo

De forma complementaria al sadismo, en el masoquismo el individuo obtiene placer al sufrir el dolor físico o psíquico causado por la pareja sexual. No obstante, este siempre tiene la potestad de establecer límites que han de ser respetados en todo momento.



¿Cuáles son los beneficios del BDSM?

¿Presenta riesgos?

No podemos perder de vista que el BDSM puede entrañar riesgos para salud física y psicológica si no se practica de manera adecuada. Lesiones cutáneas, contusiones, daños musculares o incluso asfixia son algunos de los principales peligros; además, puede generar secuelas emocionales si no existe un verdadero consenso y un respeto absoluto.


¿Cómo practicar el BDSM?

Como habrás podido intuir, no existe una única forma de practicar el BDSM, ya que incluye un conjunto de prácticas muy diversas, aunque con una raíz común. Por ejemplo, dominación física, juegos de rol, pet play (jugar a ser mascota), needle play (infligir dolor con agujas) o asfixia erótica.

Algunas parejas se limitan a utilizar ataduras o a infligir dolor en grados muy leves para aumentar la excitación. Otras, en cambio, establecen una auténtica dinámica de dominio/sumisión interpretando sus respectivos roles dentro y fuera del dormitorio.

Hay quienes recurren al dolor físico y quienes simplemente se centran en el aspecto psicológico de la humillación. Y, del mismo modo, algunos lo practican asiduamente y solo constituye una alternativa puntual. En cualquier caso, es la pareja la que decide hasta dónde llevar el juego.

En definitiva, el BDSM puede resultar bastante placentero y estimulante para ambos miembros de la pareja. Si sientes curiosidad y deseas comenzar a introducir algunos de sus elementos, no olvides que la responsabilidad y el respeto son fundamentales en todo momento. Más allá de esto, quizá descubras un mundo nuevo de sensaciones.

Descubrí en nuestra tienda todos los elementos que puedes utilizar para esta practica!



Mi carrito